Este texto forma parte de mi Lista de logros del gobierno de AMLO y Morena.
Durante el sexenio de Andrés Manuel López Obrador, presidente emanado del partido Morena, no solamente nos hemos enterado de gravísimas omisiones y malas decisiones tomadas por los expresidentes, que han causado pérdidas billonarias al país, sino que además se les otorgaban privilegios sumamente onerosos: una pensión vitalicia superior a $100,000 al mes, el 80% de esa pensión para su viuda, multitud de guardaespaldas del Estado Mayor Presidencial y empleados administrativos.
El costo total se estimaba en varios millones de pesos mensuales por cada expresidente. El presidente solicitó la cancelación legal de esta pensión y los diputados y senadores de Morena realizaron las reformas necesarias, ya que esta pensión de hecho no se encontraba estipulada en ninguna ley, era más bien una costumbre inaudita (¿a qué empleado en México lo pensionan por 6 años de trabajo?), que no estaba estipulada en ninguna ley, como una de sus primeras acciones de gobierno, cumpliendo así una de sus promesas de campaña desde el primer mes de su sexenio.
Cabe señalar que tomó esta decisión sin ser derechohabiente del IMSS, por lo que solamente tendrá derecho a la pensión universal, derecho que tendrán todos los expresidentes y que es del mismo monto para todos los mexicanos.
También cabe señalar que Vicente Fox y Felipe Calderón solicitaron protección después de que se les retiró, alegando graves riesgos por posibles amenazas. Ambos la recibieron con un bajo número de elementos del ejército, pidiendo Vicente Fox meses después que le sea retirada.
El resultado final, es una drástica reducción de la desigualdad de condiciones entre los expresidentes y la generalidad de los mexicanos, ya que llegaban a un puesto que les garantizaba bienestar de por vida sin importar si sus decisiones eran buenas, malas, o producían mejorías económicas para ayudarnos a todos a pagar por esas pensiones.
Referencias: